A diferencia de la sensación mecánica de los ventiladores y las máquinas de remo magnéticas, un WaterRower aprovecha el poder del agua para proporcionar una resistencia suave y uniforme. Prueba un entrenamiento que se sienta y suene como remar en el agua, y uno que no tenga rival en replicar no solo la dinámica fisiológica del remo, sino también el placer estético.